En Jardín de Villa Valeria, el narrador cuenta en primera persona una historia de 20 años, desde su llegada a Madrid a principios de los sesenta hasta la subida de los socialistas al poder en 1982. Es la crónica de una fascinación, la juventud perdida, los cambios sociales, los nuevos amores, la frustración perdida en definitiva, la melancolía del paso del tiempo en torno a una mansión derruida.
En el jardín abandonado de una gran mansión que estaba derruida por dentro e intacta por fuera se reunía desde mayo del 68 un grupo de alegres jóvenes progresistas. Eran intelectuales, artistas, profesionales y ejecutivos de las primeras multinacionales; vestían la
pana de los domingos y tenían niños destraumatizados. Alrededor de la casa derruida los fines de semana ellos reían, conspiraban, celebraban comidas colectivas, asistían a la descomposición de la dictadura. Franco mataba rebecos y perdices, firmaba sentencias de muerte, pero aquellos jóvenes progresistas que habían conocido el amor bajo los gases lacrimógenos establecían en el jardín de Villa Valeria todos los ritos de una generación que iba a marcar después la política y la cultura.
Ambientadas en ciertos círculos progresistas madrileños deudores en alguna medida de las secuelas de mayo del 68 francés, las páginas de Jardín de Villa Valeria narran la historia de un grupo de jovenes agrupados en torno a una mansión semiderruida, que pierden sus energías y sus ilusiones de forma paralela a la reconstrucción del edificio.
Manuel Vicent vuelve a su habitual tono intimista en la que es una amarga crónica de sus recuerdos. Acontecimientos históricos como la dimisión de Suárez en 1981, el golpe militar y la llegada al poder de los socialistas, hitos en el reciente capítulo de la transición española, sirven de telón de fondo a una historia vivencial, de tono reflexivo.
En el acto de presentación de esta obra, el escritor valenciano precisó que «esta novela hace referencia a una generación inconformista que se fue desmoronando poco a poco».
Para Vicent «aunque la literatura sea un modo hedónico de vivir, el escritor tiene que haber sufrido y gozado mucho en la vida; tiene que escribir lo que ha vivido».
Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
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Re: Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
Lo leí hace mucho tiempo y con agrado, me gustó más tranvía a la malvarrosa, del que este sería como una continuación, ya que son como memorias noveladas. De todas formas a quien le guste Manuel Vicent, aunque bien pensado ¿hay alguien a quien no le pueda gustar?, no puede perderselo.
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Re: Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
Bueno Arden, he de decir que el libro se deja leer pero sin profusión de fuegos de artificio. La verdad es que hace un repaso bastante exhausto de los tiempos inmediatamente anteriores y posteriores a la llegada de la democracia. En algunos pasajes da algún que otro palito a gente autodenominada progresista y que hoy en día vive montada en el euro gracias a la política y "sus tratos de favores". Y por momentos se hace moderadamente divertida.
Es la primera obra larga que leo de Manuel Vicent, autor al que tengo en un altar como articulista y, sobre todo, como columnista de contraportada. ¡Qué recuerdos de mis paseos dominicales madrugadores por El Retiro leyéndome su columna de El País! Y realmente el Manuel Vicent novelista de este texto es totalmente distinto al poético Manuel Vicent articulista.
Es la primera obra larga que leo de Manuel Vicent, autor al que tengo en un altar como articulista y, sobre todo, como columnista de contraportada. ¡Qué recuerdos de mis paseos dominicales madrugadores por El Retiro leyéndome su columna de El País! Y realmente el Manuel Vicent novelista de este texto es totalmente distinto al poético Manuel Vicent articulista.
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Re: Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
¡Qué recuerdos de mis paseos dominicales madrugadores por El Retiro leyéndome su columna de El País
Me aburre Vicent.
Prefiero sus artículos
La felicidad es un sillita al sol
Re: Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
Gretogarbo te recomiendo Tranvía a la Malvarrosa y Balada de Caín, te gustarán más que El jardín de Villa Valeria.
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Re: Jardín de Villa Valeria - Manuel Vicent
Los tengo en las baldas de pendientes; ya caerán. Gracias Arden.
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