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Miguel de Unamuno. Biografía de Colette y Jean-Claude Rabaté
Esta biografía de Unamuno redefine la personalidad de un intelectual comprometido cuyas vivencias y acciones estuvieron estrechamente vinculadas a la vida política y cultural de España durante más de cinco décadas. Gracias a nuevas fuentes como sus cuadernillos autobiográficos de juventud y vejez, su abundante epistolario –en parte inédito–, centenares de colaboraciones periodísticas en España y América Latina e innumerables discursos rescatados de la prensa, se destaca la figura pública y privada de una personalidad polifacética.
ISBN: 978-84-306-0761-7
Páginas: 784
Precio: 21 Editorial Taurus
Autores: Colette Rabaté es profesora de Lengua, Literatura y Civilización española en la Universidad François Rabelais de Tours y autora de numerosos artículos y obras como Le Temps de Goya (1746-1828) (Nantes, 2006) y ¿Eva o María? Ser mujer en la época isabelina (1833-1868) (Ediciones de la Universidad de Salamanca, 2007).
Jean-Claude Rabaté es catedrático de Civilización Española en la Universidad Paris III-Sorbona y autor de numerosos estudios sobre Miguel de Unamuno como intelectual comprometido. Entre sus obras destacan 1900 en Salamanca, (Ediciones de la Universidad de Salamanca, 1997) Guerra de ideas en el joven Unamuno 1880-1900 (Biblioteca Nueva, 2001) y una edición crítica de los ensayos de Unamuno, En torno al casticismo (Cátedra, 2005).
Por este hilo de esta obra tan sugerente y por recordarnos a Miguel de Unamuno... ¡siempre presente para mí!...
Lo vi el otro día en la mesa de novedades de la librería, aunque por lo visto es del 2009.
Sobre Unamuno, tengo una anécdota. Las pocas referencias biográficas que tengo de él se deben a cuando cursaba el bachillerato, por lo que son escasas. Pero de su obra literaria sólo he leído Niebla, y ha sido el único libro que me ha imposibilitado dormir, recuerdo que lo terminé por la tarde y durante la noche parecía murmurar en mi cabeza. Me pareció extraordinario, sorprendente, inusual, extraño e incluso incómodo. Por lo que este docto se ha ganado mi respeto y turbación.
Estoy pendiente de Amor y pedagogía y Del sentimiento trágico de la vida.
SamV escribió: Estoy pendiente de Amor y pedagogía y Del sentimiento trágico de la vida.
De los que pones como pendientes, SamV te recomiendo vivamente el segundo... ¡Es uno de esos libros que te hace pensar, meditar y reflexionar!... algo poco usual en nuestros días...
¡Ya nos contarás!
Pasado: Los perdedores de la Historia de España de Fernando García de Cortázar.
SamV escribió: Estoy pendiente de Amor y pedagogía y Del sentimiento trágico de la vida.
De los que pones como pendientes, SamV te recomiendo vivamente el segundo... ¡Es uno de esos libros que te hace pensar, meditar y reflexionar!... algo poco usual en nuestros días...
¡Ya nos contarás!
Te tomo la palabra, en cuanto termine esta biografía me pongo con él.
Sobre este libro biográfico, ya comentaré más detenidamente. De momento llevo hasta su llegada a Madrid para estudiar Filosofía y Letras en la Universidad Central. Lo que llama la atención es que ya con 8 años leía libros de la biblioteca de su padre relacionados con cuestiones filosóficas. Despertó muy pronto sus inquietudes existenciales, y antes de hacer la comunión ya había leído El protestantismo comparado con el catolicismo del teólogo Jaime Balmes.
SamV escribió: Te tomo la palabra, en cuanto termine esta biografía me pongo con él.
Sobre este libro biográfico, ya comentaré más detenidamente. De momento llevo hasta su llegada a Madrid para estudiar Filosofía y Letras en la Universidad Central. Lo que llama la atención es que ya con 8 años leía libros de la biblioteca de su padre relacionados con cuestiones filosóficas. Despertó muy pronto sus inquietudes existenciales, y antes de hacer la comunión ya había leído El protestantismo comparado con el catolicismo del teólogo Jaime Balmes.
Espero que sigas profundizando en este pensador universal...
Pasado: Los perdedores de la Historia de España de Fernando García de Cortázar.
El libro es una biografía enfocada al trato político de Unamuno. Profundiza en su carrera política y sus labores como analista político en multitud de periódicos de la época como el periódico krausopositivista La Libertad, el folletín informativo de Pablo Iglesias; Lucha de clases, prensa argentina como La Razón o Crítica, o la revista ilegal desde el exilio francés; España con Honra.
En cuanto a su vida, Unamuno nace un 29 de septiembre de 1864 en un Bilbao(al que llama ''bochito''), apenas destaca durante su época de estudiante consiguiente simplemente aprobados. Pero si despierta su interés por la lectura, pues su padre(fallece joven) era un ávido lector y va dedicando su tiempo libre a pasarlo en su biblioteca. Ahí tiene contacto con los libros de Jaime Balmes, con Las nacionalidades de Pi y Margall(libro político que le marcará), así como a los clásicos.
Su llegada a Madrid para estudiar Filosofía y Letras es crucial en su personalidad, pues no sólo deja atrás a su novia, Concepción Lizárraga y su familia, sino que se encuentra solo. Descubre que el Madrid de tertulias no es tal como se esperaba, pues la gran mayoría de las conversaciones giran entorno a tres temas: la política(con Antonio Cánovas del Castillo y Práxedes Mateo Sagasta), el teatro(con los actores Rafael Vico y Antonio Calvo) y el toreo(con los toreros Lagartijo y Frascuelo). Su paso por la villa madrileña le hace perticir una fuerte soledad, y un sentimiento nostálgico de su tierra vasca. Tras finalizar su carrera universitaria(con muy buenas notas) se doctora bajo la tesis Crítica del problema sobre el origen y prehistoria de la raza vasca el 20 de junio de 1884. Del lado más positivo que encuentra de Madrid, es conocer el Ateneo madrileño caracterizado por los krausistas y los miembros de Institución Libre de Enseñanza, donde recibe cursos sobre Historia Universal y Ciencias Naturales, desde un enfoque positivista y evolucionistas. Además dan conferencias sobre filósofos europeos, tales como Hegel, Kant o Spencer.
Su regreso a Bilbao, se reduce a una vuelta de dificultades económicas. Pues empieza a endurecerse la crisis del 98 en España. Pero también sus sueños de formar una familia con Concha. Empieza a opositar a diferentes cátedras de España mientras compagina dando clases como profesor interino, y escribiendo artículos en la prensa local, especialmente en El Norte y Bilbao Ilustrado. Tras algún que otro fracaso como opositor consigue la cátedra para Griego en la Universidad de Salamanca el 13 de julio de 1891. Sus clases están marcadas por anécdotas, como que da las clases sin estufa, con las ventanas abiertas en pleno enero. O cuando un alumno le pregunto el primer día de clase: ¿qué tema hay que estudiar para mañana? Respondió Unamuno: toda la Gramática. Tenía cierto aprecido por el alumnado desde el primer día, pues en la conferencia en el paraninfo de su nombramiento, no se dirigió a los altos cargos presentes, sino que se fue al sector donde estaba el alumnado, dejando de lado a ese sector de cierta importancia social.
En Salamanca, se adentró en la política local con grandes dialécticas en periódicos liberarles contra los más conversadores. Otra anécdota es la de una carta de un alumno al diario La Democracia diciendo que no entienden las disputas tan polémicas entre Unamuno y las personalidades locales, pero que ellos(los alumnos) está con Unamuno, siempre.
Al tiempo consigue el rectorado de la Universidad con una votación mayoritaria en el Claustro, pero su polémicas y críticas contra Alfonso XIII, Eduardo Dato, Martínez Anido y al conde Romanones, le lleva a una pequeña conspiración para abandonar el rectorado.
Con la toma de posesión de Primo de Rivera, se acrecienta sus críticas hacia el Directorio Militar, lo que le lleva a una censura por parte del régimen. Siendo exiliado a Fuerteventura el 20 de febrero de 1924. Allí, junto con Rodrigo Soriano(hasta entonces presidente del Ateneo, que también es desterrado) sigue mantiendo su estudio, sus escritos y traducciones(conocía el italiano, francés, alemán y sueco, incluso alguna noción del azteca). El Régimen militar deroga la Real Orden que le mantiene en el exilio, pero se niega a seguir en una España llena de carencia política y censura. Se marcha a París.
En París mantiene, junto con otros intelectuales exiliados, un profundo análisis de la situación que atraviesa España en el conocido por el Régimen; Comité Revolucionario de París. La publicación más dura de este ''comité'' la protagoniza Blasco Ibáñez con el artículo Una nación secuestrada contra el Ejército, el rey y la nación española. Pero en 1926 se translada a Hendaya, donde continúa su exilio voluntario.
A la vista de la situación que acontece en España, regresa con ovación de la población española el 13 de febrero de 1930. Días más tarde moriría Primo de Rivera, y tomaría posesión del poder ejecutivo el general y jefe del Cuarto Militar, Dámaso Berenguer, y posteriormente el almirante Juan Bautista Aznar-Cabañas. Es en esta época donde se reune con los intelectuales y políticos de Alianza Republicana, como Manuel Azaña, Indalecio Prieto, Alcalá-Zamora, Alejandro Lerroux, etcétera.
Tras la proclamación de la República española el 14 de abril de 1931, Unamuno vuelve a ser nombrado rector de la Universidad salmantina(que ocuparía hasta el año 1934). Tiene puestas muchas esperanzas puestas en este cambio político y social, de hecho llega a ocupar puesto de gobierno en la presidencia de Alcalá-Zamora. Pero no está conforme con la política. Unamuno nunca perteneció a ningún partido político, por lo que él defendía una clase política sin etiquetas, ni de izquierdas ni derechas. Manteía una crítica a la sociedad porque ''antes no querían a la Monarquía, y ahora no quiere a la República'', además siempre se posiciono en favor de una Guerra Civil en España, pero no una guerra civil con sangre, sino de palabra.
Con la rebelión Francisco Franco en 1936, se produce una conferencia literaria el 12 de octubre en la universidad, donde se produce una duro diálogo entre Unamuno y Millán Astray, el cual llegó a afirmar; ''muerte a la intelectualidad traidora'', por las referencias del discurso de Unamuno al escritor José Rizal. Unamuno finalmente es recluido en su hogar de la calle Bordadores, donde fallecería el 31 de diciembre de 1931 por una hemorragia bulbar.
El ensayo biográfico, hace poca referencia a su labor literaria, salvo contados sonetos que se convertirían en su diario personal. Debido a que instan los autores a la lectura de su obra para conocer al magnífico escritor. Recomendaría su lección porque muestra esa cara del autor que luchó con la soledad como acompañante, con la incompresión política y filosófica, sufrió la muerte de un hijo pequeño, la de su hija Salomé tras ser madre y profundos y hondos conflictos familiares, además de la desesperanza de vivir en una exilio solitario por quién defendió su amor a España y la universalización del castellano. Muchos deberían dar su ejemplo.
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