Hola a tod@s. Primeramente, querría sugeriros leer una reciente entrevista concedida por la autora al periodista Ferrán Mateo en la edición digital de Russia Today (también hay un canal de TV), que aborda temas tan interesantes como sus dos últimas novelas, sobre el tema del Holocausto y la Historia de Rusia desde Stalin hasta Brodsky -otro de los "exiliados" como Ayn Rand, Nabokov o Berberova- y algunas otras particularidades.
http://rusiahoy.com/blogs/2013/05/12/li ... 27767.html
Podríamos esgrimir, sin el menor género de dudas, que junto a Pelevin, Makine y Rybakova, nos hallamos ante la autora más significativa del moderno panorama narrativo ruso, que ha de lidiar con la excelsitud de épocas pretéritas. Una de las chicas que colabora conmigo en epdlp, rusa, Lena Sorokina -a la cual espero que conozcáis próximamente, junto a una chica checa, Miri, cuya coadyuvante labor -creo que ésa sería la palabra justa es impagable- me sugirió ayer abrir un hilo sobre esta autora.
Se han publicado en castellano sólo cuatro novelas: "Los alegres funerales de Alik" (primera obra que leí suya y sobre la cual espero abrir un hilo -yo o Lena si finalmente entrara- "Sonechka" o "Soniechka" (la novela que abarcamos ahora), "Suyo siempre Shúrik", novela que no he leído y en torno a la cual estamos trabajando para esclarecer un hecho. Según varias biografías consultadas, se le concedió el premio Grinzane Cavour, en el apartado de narrativa extranjera en el año 2008
http://www.epdlp.com/premios.php?premio ... e%20Cavour y según nuestra base de datos había correspondido a Bernardo Atxaga. En la web oficial, he podido leer que los galardonados fueron tres: Bernardo Atxaga por "El libro de mi hermano", que recibió una mención especial, Ingo Schulze por "Vida nueva" y Liudmila Ulítskaya por "Sinceramente suyo, Shúrik".
Llama la atención sobre esta autora su variedad temática, la aplicación de su formación científica (procede del mundo de la Biología) a la hora de diseccionar a los personajes, especialmente femeninos, como si fuera una entomóloga.
Se ha criticado por parte de la Comunidad Rusa en España la labor traductora de Marta Rebón (Anagrama) y Víctor Gallego (Lumen). Admitiendo que toda traducción es una delación de la versión original, me parece especialmente interesante la traducción de Marta Rebón, al ser mujer que traduce a otra mujer, por lo que habrá captado matices inherentes al respecto. Sobre la pérdida de matices me remito a Lena y Miri- ellas podrán aclararnos mejor esta polémica, por otro lado inevitable-. Se la ha tildado de escritora "artificial" y "tramposa" que escribe "cosas de mujeres". ¿Quién? Ha sufrido exacerbadas críticas por parte de otras mujeres. ¿Por qué? En su momento publicó una obra titulada "Debochki" (no publicada aún en castellano) en la que desarrolla ese rol ambiguo en torno a la mujer rusa, siempre bajo sospecha de prostitución o falso interés, en torno a una serie de circunstancias sociopolíticas que conviene ajustar en su justo contexto (me vuelvo a remitir a lo que puedan decir mis compañeras Lena y Miri, esperando que finalmente se decidan a entrar)
La portada del libro representa el lienzo de Konstantin Somov, "Mujer dormida", fechado en 1909 y sito en la galería moscovita Tretyakov. Por si pudiera ser de interés, os adjunto el perfil que mis compañeros de la sección de Bellas Artes han elaborado de él Cf.
http://www.epdlp.com/pintor.php?id=6800 Efectivamente, no está el cuadro en cuestión -esperamos añadirlo pronto-
http://www.abcgallery.com/S/somov/somov48.html Como curiosidad reseñar que mi cuadro favorito de Somov se llama como una de las usuarias de este sitio "Lady Blue" "La mujer de azul", que además es el título de una de mis canciones favoritas de Bad Boys Blue -pero ésa es otra historia-
En la reseña redactada por Marta Rebón se alude al trazo de tres perfiles diferente de feminidad, representados por la madre, la hija y la amante. Personalmente, prefiero hablar de feminidad en singular. La poesía ha preponderado una imagen un tanto "dulcineica" de la mujer. "Un ser deseado y deseable, pero exento de deseo" ¿Por qué? Tal vez el hombre, incapaz de entender a la mujer, la ha idealizado injustamente, erigiendo un ser que nada tiene que ver con la realidad, idealización, por otra parte, que como muy bien insinúa la propia Ulítskaya podría ser de lo más perniciosa en las relaciones entre ambos sexos.
Veladamente, el personaje de Sonechka o Soniechka se pregunta por el sentido de la maternidad. ¿Por qué ser madre? O dicho de otra forma, ¿para qué el sacrificio del amor?