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Dentro de poco va a cumplir sesenta años y está casado con una mujer de la que nunca ha estado verdaderamente enamorado. Su notaría es una de las más importantes de la ciudad, dispone de más dinero del que necesita y por fin puede tomarse todo el tiempo libre que quiera. Pero desde hace unos meses ha dejado de desear. Los viajes, el mar y hasta la pintura y las mujeres han comenzado a serle indiferentes. Él creía que la vejez iba a ser la desesperación de desear algo y no tener fuerzas para conseguirlo, y no esta planicie sin gozos ni dolores. Un día entra en un bingo. Se sienta en una mesa y piensa, como le sucede a menudo estos días, en Ana, su primer amor. Pero muy pronto llega Rosa, una madura y aún atractiva binguera, que además es muy sabia, como descubrirá nuestro hombre cuando ella se convierta en su guía por ese nuevo mundo. Una comunidad que le ofrecerá una segunda oportunidad de gozar, de desear.
Hoy fui a la Biblioteca y se me ocurrió buscar uno de Esther Tusquets. No sabía por cuál decidirme -sólo me acordé de Chubb y "El mar de los mismos veranos" o algo así y el ensayo de Pequeños delitos abominables (o algo así, también)-. Al final escogí esta, que resultó ser la última novela que escribió.
Ya os contaré qué tal está, la verdad es que tiene pinta de ser entretenido, aunque no sé si será lo mejor para empezar con ella (el de "los veranos" no estaba).
coma Oye, pues me hace ilu que te hayas acordado de mí Ya contarás qué tal está esta Han editado hace no mucho la trilogía del mar en un mismo volumen, me la regaló mi madre por mi cumpleaños, así que si éste te gusta y decides probar con El mismo mar de todos los veranos, avísame
Lo he terminado hoy. La historia es un poco sosa (aunque el comienzo es muy interesante) y creo que le falta algo más de acción, porque no me ha enganchado del todo, sobre todo a partir de la tercera mitad.
Los bingos siempre me recuerdan a una de mis tías favoritas que se dejaba ahí los cuartos, tenía muchos y ese era su capricho (otras nos los gastamos en ropa, libros o viajes) a ella le volvía loca el bingo y era divertidísima!!!
Que sí, que me lo apunto, me parece interesante. Gracias!