El nuevo Dios (relato)

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lululaloca
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El nuevo Dios (relato)

Mensaje por lululaloca »

CAPITULO 1 "El nuevo Dios"




Aurai


¿Cuántos dioses puede haber en todo el mundo? Miles tal vez cientos, Ala y Dios son los más conocidos, el mío como era de esperar no es conocido ni popular…solo unas cuantas personas le rezan y saben cómo es “nunca ha sido visto”, ni ha hecho milagros solo sabemos que está ahí, como todo Dios tiene su rival, es oscuro y siniestro, pero nada que ver con Lucifer, este creó su propio infierno al que llamamos Dunkelheit, allí viven de todo tipo de criaturas horribles, pueden tomar cualquier forma, aspecto o tamaño, normalmente no suelen atacar a personas humanas, no está dentro de sus planes, aunque si lo hacen es para divertirse o por cualquier evento que este por llegar.
Su rey es muy cuidadoso, frio y calculador… por eso normalmente no se toman a la ligera y sin pensar lo que hacen.
En Dunkelheit es llamado Aron, y sus “demonios” son calificados como Trinker Seelen.
Nuestro Dios también tiene nombre pero nunca lo pronunciamos delante de extraños es una norma de nuestra religión, la calificación de nuestros “ángeles” es Mirakel, que significa Milagro o algo así…
Bueno dejemos mi religión a un lado, mi nombre es Aurai y vivo en Noruega, tengo diecisiete años y vivo con mis padres “no creyentes claro en mi religión”, aunque mi madre no se sabe aun, mis padres siguen la religión cristiana, aunque yo la de mi Dios, la conocí tres años atrás, típico de los viejos de la ciudad.


-oye pequeña, ¿conoces la religión de los ancianos y algunos jóvenes de aquí?-me dijo una mujer mayor mientras iba al instituto


Normalmente no suelo pararme con desconocidos y mucho menos escucharlos, pero me llamo la atención algo de esta mujer, era diferente…me acerque a ella y la mire con cautela, ese día me salte el instituto lo admito, la seguí hasta una casa apartada, cuando entramos dentro el ambiente era diferente, había trozos de papel escritos en un lenguaje antiguo en la pared y una temperatura algo más baja de lo normal, ella me mostró los documentos antiguos, al principio tenía miedo, no sabía dónde me había metido, pero poco después lo vi, era mi Dios y quería que lo siguiera, sentí su presencia dentro de mí, ya sé que pudo ser perfectamente el diablo, ósea Aron para mí, pero no se...fue muy extraño desde ese día cambie, me encamine hacia el Dios del pueblo.




***************************************


-Aurai a desayunar-grita mama desde abajo


Abro los ojos mi habitación está a oscuras, no es raro en mi ya que no puedo dormir con algo de claridad, sin embargo una vez despierta tengo que ver luz, no soporto estar a oscuras, busco a tientas la llave de la luz, no es una tarea fácil ya que puedo chocar me con los santos, si siendo de otra religión sigo teniendo cosas cristianas en mi habitación, las estatuitas de la virgen, de los ángeles, de Jesús, cruces...como antes mencione mis padres son cristianos...se me olvido mencionarlo, ambos son españoles al igual que yo, nos mudamos aquí después de que los jefes les ordenaran venir, bueno una orden no fue, era más o vas o te quedas sin empleo, así es como llegue aquí, ambos son médicos, yo estudio primero de bachiller, es complicado la verdad, lo que mejor se me da es el español, con eso saco un diez.
Me levanto de un salto de la cama y bajo, papa se toma su café mientras lee, mama solo friega los platos, me siento a su lado y le miro, papá es un hombre joven de unos cuarenta y ocho años, pelo corto canoso, aunque aún sigue teniendo su toque oscuro, ojos marrones, sonrisa blanca, esta gordito como todos los hombres de su edad, su camisa es celeste y sus pantalones vaqueros, se nota que hoy no trabaja, mamá tiene su misma edad, su pelo es cobrizo “se echa tinte”, su color natural es marrón claro, sus ojos también son de un color común, ella va más cómoda, se nota que pronto entra a trabajar, yo no me parezco a ninguno, mi pelo es rojo y liso, siempre suelo tenerlo recogido en un buen moño y mis ojos son verdes y azules según les dé por ponerse.


-come rápido que friegue los platos pronto tengo que irme-me mete bulla


Ahora mismo voy vestida con el pijama de Garfield de manga corta, cojo la tostada de mi plato color verde y la unto con mermelada, capricho divino.
Hoy no tengo instituto así que lo dedicare para ir con Liz a los centros comerciales, después de mudarme aquí la conocí, fue la única que me echo una mano con el idioma, mis padres no se podían parar conmigo, termino de desayunar y le entrego el plato, subo a mi cuarto y cojo mi móvil, marco el numero de Liz y espero, ella no es de mi religión, creo que ella le va el rollo budista...


-Buenas nena-me dice con su voz fina y clara
-hola Liz- respondo rápida-¿quieres venir de compras?-le ofrezco
-claro que si, en ocho minutos estoy ahí-me cuelga sin despedirse


Ella es así, no puedo pedir más, recojo lo más rápido que puedo mi cuarto y me visto, ocho minutos significan media hora para mí, me arreglo un poco y espero en el sofá de abajo, es bastante suave y blando, impresiona con lo barato que costo, precios ganga el mejor mercado para comprar.
Escucho el timbre y la silla de mi padre deslizarse hacia atrás, anda hacia la puerta y escucho la llave hacer ”clic”, me levanto y voy hacia esta a tiempo de ver a Liz maquillada, con una camiseta que vamos se podría decir que destaca sus dotes y unos pantalones pegados, me sorprendo.
Papa la mira como si fuera su padre y hace un gesto con la cabeza, lo que se viene a referir que no le gusta el traje, la gente que no le conoce ni se entera.


-¿dónde vamos primero?-me pregunta con una sonrisa
-a women secret, quiero un pijama nuevo-digo acercándome a ella-adiós papa-me despido de él, parece pensativo
No le gusta Liz, o al menos su vestimenta, estoy segura de que tratara de encontrar una escusa para que no vaya con ella, cuando vivíamos en España era fácil, “no vayas con ella es un engendro de Lucifer, te guiara por el mal camino”.
Ahora ya no puede engañarme con eso, a no ser que me diga que es un engendro de Aron, aunque que yo sepa él no tiene hijos ni hijas y que me lo demuestre claramente no caeré en su trampa.


-vamos a esa-me saca de mi trance Liz con un codazo


Soy una persona muy distraída tenedlo en cuenta, acabamos de llegar al centro comercial, os explico un poco, tiene dos plantas, la de abajo es totalmente de ropa y la de arriba es mitad comida, mitad ropa, aunque también hay perfumería y una especie de Carrefour o como se escriba...tiene de todo, está bastante cerca de casa, podemos ir andando para no tener que desperdiciar gasolina.
Entramos en la tienda X se dicen de las tiendas que no tienen denominación, ella mira todos los artículos, yo me distraigo con las pulseras y collares de las estanterías.


-¿qué tal me queda?-dice saliendo de unos probadores que están cerca de mi


Justo pasa un chico y se nos queda mirando mas a ella que a mí, seguro que se la ha imaginado desnuda, sigue su camino, ella me mira con una sonrisa y se acerca.


-creo que se me ha quedado mirando-dice en voz baja con una risita
-le has gustado-digo mirando al chico-lástima que la novia este entrando-le señalo a una chica


Liz la sigue con la mirada, querría estar equivocada pero jamás me equivoco con estas cosas, es una chica rubia bien formada, con curvas peligrosas, lleva sus típicas gafas rosas en el pelo y varias bolsas en las manos, habla por teléfono con una amiga, porque dudo que le hable en ese tono a su madre, se acerca al Ken por detrás y lo abraza, ambos se funden en un beso de buenos días.


-eres un mal fario-dice asintiendo con la cabeza


Liz es muy alta y guapa, su pelo es ondulado, tiene mechas californianas en varias zonas de su cabello, sus ojos son de color miel algo típico también.
No siempre a pertenecido a Noruega, antes creí entender que estaba en Alemania (Berlín),vuelve dentro de los probadores y se cambia, ahora que puedo verlas a ambas a la vez diría que es mejor partido la otra chica…no es por el físico, Liz le da dos vueltas, es más bien por el carácter, la ropa aunque no lo parezca muestra mucho de la persona, ella es mas coqueta, parece que dice “yo solo soy de él” y Liz por el contrario es mas “soy de todos”.
-le doy dos vueltas a su chica, ¿Qué se ha creído?, ¿Qué puede mirarme y luego morrease con ella? Se va enterar-me dice cabreada


Va hacia ellos a paso normal sin prisas, debería pararla pero es cosa suya, es como terminator, “nadie puede detenerla”, se para frente a ellos.


-¿molesto?-dice con una sonrisa


La chica rubia corta el beso, se separan desganados y la miran


-¿Qué podemos hacer por ti?-le preguntan
-tu chico me ha mirado antes y claro ahora que se morree delante mía, pues no me sienta bien-dice claramente
-mi chico no haría eso-dice mirándole
-mi amiga también lo vio, fue un descaro por su parte-se cruza de brazos


La chica me mira esperando una negativa, un cámara oculta, me quedo quieta y no intervengo, la dependienta está pendiente sabe que pueden acabar tirándose de los pelos.
En vez de lo que todo esperábamos, la chica coge a su novio de la mano y sale de la tienda, dejando a Liz con la palabra en la boca, la dependienta respira tranquila, me acerco a Liz la que esta aturdida, no entiende lo que ha pasado.
Salimos de la tienda, ella no está igual que antes, pide salir de allí, yo la acompaño hasta su casa, deja el bolso en la entrada y sube arriba, se tumba en su cama, ¿puede ser que le haya dolido su comportamiento? Sería la primera vez para ella…


-Aurai…-me llama suavemente
-¿sí?-me acerco al borde de la cama
-la próxima vez…-espero un detenme
-¿Qué?-pregunto convencida
-ayúdame a convencerla-me mira a los ojos-me gustaba el chico para añadirle a mi colección
-¿estás así por eso?-enarqueo la ceja
-no, simplemente me dolían los pies-contesta


Niego con la cabeza, esta niña no hay quien la entienda, me pongo en pie.


-¿Dónde vas?-pregunta mirándome
-a mi casa, voy a hacer unas cosillas-le digo, es mentira claro esta
-¿vas a rezar a ese Dios tuyo?-viene a referirse al cristiano
-si luego hablamos-me despido con la mano y vuelvo a casa




*************************************************


Papa está en sus cosas cuando llego, apenas se percata de mi presencia, lee un libro de Shakespeare, se mete demasiado en el papel, subo a mi cuarto y me tumbo en la cama a la espera de la hora del almuerzo, no sé qué hacer estoy como un león enjaulado, cierro los ojos y agudizo mi oído, se pueden escuchar todo tipo de movimientos, del viento normalmente o de algún bicho que esté pasando.
Sin darme cuenta de lo que hago me profundizo en un sueño, quedo totalmente dormida con la mente en blanco.


-Aurai despierta-escucho a mi padre gritar ilusionado


Abro lentamente los ojos, está en un lado de la habitación, está dando vueltas muy alterado.


-¿Qué pasa?-digo levantándome
-Dios existe-dice feliz de ello
-¿y?-pregunto estirándome-no es nada nuevo
-sí que lo es, el nos ha hablado…quiere que nos reunamos en el valle, el hará su demostración allí, por fin hace presencia-salta de alegría-ponte tus mejores galas-se va del cuarto


Esto es imposible… ¿Por qué ahora?, ¿y mi Dios?, tengo que encontrarla…Salgo a la calle sin consultarlo con mi padre, todos miran al cielo, está completamente despejado, sigo hasta el espeso bosque y busco su casa, toco varias veces, al principio no obtengo respuesta, pero después oigo como sus pies cansados se arrastran hacia la puerta, esta se abre escalofriante mente mandando un escalofrió a mi cuerpo, la mujer esta como yo la recordaba, con su pañuelo en la cabeza y un vestido negro de abuela…esta me mira sorprendida.


-¿Cómo tu por aquí Aurai?-pregunta dándome paso


Cierra la puerta en cuanto entro, se acomoda en su mecedora, la mujer aparenta tener setenta años, aunque esta cerca de los noventa, está bastante cuidada para su edad, su pelo es de color blanco y sus ojos grises…


-¿en qué puedo ayudarte pequeña?-me pregunta balanceándose
-¿no has escuchado la noticia?-pregunto mirándola
-¿Qué noticia?-me pregunta con su vocecilla interesada
-el Dios cristiano ha vuelto recuperando muchos de sus fieles-le digo cabreada


La mecedora se para en seco


-¿Cómo dices?-pregunta de nuevo
-el Dios de mis padres a aparecido…-no me deja acabar la frase


Ella se pone en pie y abre el armario, saca una maleta y sus cosas


-¿Dónde vas?-pregunto sorprendida
-El dios cristiano hará que me calcinen, no puedo permanecer aquí mucho tiempo mas-me dice ella-tu también deberías marcharte si quieres seguir con vida


Justo cuando está a punto de abrir la puerta se escuchan pasos en el bosque, ella la cierra rápidamente e indica que salte por la ventana y me esconda en el bosque, hago lo que me pide, no me voy muy lejos de su casa, me subo a una rama de un árbol y espero, son hombres armados y no tienen cara de ser amigos, reconozco a varios de ellos, pertenecían a nuestra religión.


-¡sal vieja o haremos que ardas con la casa!-gritan con las armas preparadas


Sale con las manos en alto, los hombres se acercan a ella y le atan las manos, no sé donde la llevan pero creo que no es conveniente seguirlos, uno de ellos lanza una antorcha a la casa y esta se prende, se retiran de allí, espero un rato antes de volver a casa, no quiero que me cojan por estos barrios, justo cuando voy a poner el pie en el suelo se escucha un disparo a lo lejos, no puedo creerlo… ¿la han matado? Me quedo blanca sin saber que decir, salgo corriendo, cuando doy con ella está sola tirada en el suelo, le doy la mano.


-Aurai…-dice como puede-coge mi collar es un regalo de despedida para ti
-te pondrás bien-le digo
-te pido que recuerdes a nuestro señor, y que… no intentes ayudarme o te mataran a ti también-son sus últimas palabras antes de morir
-Descansa en paz-le digo cerrándole los ojos


Continuara...
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lucia
Cruela de vil
Mensajes: 84572
Registrado: 26 Dic 2003 18:50

Re: El nuevo Dios

Mensaje por lucia »

Necesita un repaso muy profundo de comas, puntos, tildes y mayúsculas.

Por lo demás, el estilo es demasiado juvenil para mi gusto.
Nuestra editorial: www.osapolar.es

Si cedes una libertad por egoísmo, acabarás perdiéndolas todas.

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