Fecha de publicación: 16/10/2012
288 páginas
Idioma: Español
ISBN: 978-84-233-2959-5
Código: 10010026
Formato: 14,5 x 22,7 cm.
Lomo 232
Presentación: Rústica con solapas
Colección: Imago Mundi
Lo estoy terminando por cabezonería, porque me parece bastante flojito en general salvo un par de trozos y la parte que le dedica a la mentira. De todas formas, mis expectativas iban hacia el subtítulo (Cómo alcanzar la excelencia en la comunicación personal) y los tiros van sobre el amor y el sexo (términos que para él parecen intercambiables y sinónimos, lo mismo que plan de marketing y de negocios), con un punto de vista bastante etnocéntrico y actual incluso cuando habla de los homínidos que salieron de la sabana africana (las mujeres elegían a los hombres que mas las entretenían de palabra y que mas artísticos eran ).Planetadelibros escribió:En nada ha invertido tanto la naturaleza humana como en comunicación. Desde el momento en que la diferenciación sexual obligó a los homínidos a relacionarse entre ellos para perpetuar la especie, la biología humana ha evolucionado a marchas forzadas para hacer esa relación más productiva, más plena y más eficiente. Resultado: las innovaciones de más éxito a lo largo de la evolución siempre han ido asociadas a grandes ventajas comunicativas.
Así, nuestra necesidad ineludible de agradar a los demás ha dejado rastros en nuestro cuerpo en forma de postura erguida, labios sobresalientes y facciones armoniosas, y también en nuestra mente, al hacer surgir emociones como el amor, imprescindible para unir a dos personas en la crianza de una prole que necesita más atención, y durante más tiempo, que la del resto de animales.
Con todo, el producto más espectacular de nuestras ansias comunicativas es, sin duda, el lenguaje, una invención excepcional que permitió a los humanos procesar lo que ocurría en su entorno de una manera mucho más eficaz que hasta entonces, al hacer más fácil obtener información, guardarla en la memoria, recuperarla, recombinarla e incluso manipularla para engañar a los demás.
Y, sin embargo, el lenguaje es mucho más que un medio de transporte de información cotidiana: al adquirir la capacidad de hablar y entender lo hablado, conformamos nuestra cognición y adquirimos los conocimientos atesorados durante generaciones, los que nos ayudaron a adaptarnos al medio y perpetuarnos como especie. Los que nos permitieron, en suma, sobrevivir.
Por lo demás, al que comparta su punto de vista freudiano de que el sexo para reproducirse en pareja es el objetivo de la humanidad, así como la felicidad y la suavidad en las relaciones, el libro le gustará. Mientras, me quedo con las partes en las que destierra los adjetivos calificativos y se centra en la ciencia, y al que quiera mejorar la persuasión le recomiendo leer Consiga más, de Stuart Diamond.