Es lo segundo que leo de Swirsky y tengo un tercero en el lector, pero si es del mismo estilo, no volveré a leerlo. Tiene un estilo pseudo onírico que me resulta demasiado pretencioso.Los héroes se disponen a navegar hacia Troya, pero el viento no aparece. Para llenar sus velas y partir, deben sacrificar a la hija de Agamenón, Ifigenia... ¿y cómo una niña se convierte en viento?
En este caso, cuenta los últimos recuerdos de Ifigenia en primera persona, desde que la empiezan a preparar para casarse con Aquiles en Micenas hasta que se convierte en el viento que empuja las naves, pero se queda en humo (o en aire en movimiento), completamente vacuo. El único personaje medio coherente es Elena y el trasfondo histórico lo tiene de eso, de trasfondo.
Se puede leer en la web de la editorial http://www.tor.com/2009/11/03/a-memory-of-wind/